Hay muchas maneras de apoyar o cuidar a alguien. Yo soy un sanador energético.

No soy médico; no tengo derecho a hacer un diagnóstico médico ni a pedirle que interrumpa un tratamiento.

Creo en el valor de los enfoques holísticos que adoptan una visión diferente y complementaria de la medicina moderna.

Mi práctica se basa en mi formación personal y mi interés por una amplia gama de temas: fisiología, reflexología, mediumnidad, constelaciones familiares, neurobiología, antropología, experiencias extracorpóreas y cercanas a la muerte, radiestesia, chamanismo, hipnosis, física cuántica, etcétera.

Para mí, todo en el universo es energía y vibración, lo visible y lo invisible coexisten, por lo que todo está interconectado.

No pretendo pertenecer a ninguna escuela en particular. Algunos dicen que practico una especie de Reiki… Utilizo las manos para sentir y canalizar la energía. También utilizo péndulos y conceptos como los chakras.

Estoy convencido de que cada individuo es único y de que hay muchas maneras de alcanzar el bienestar. Uno puede curarse de todo (y es uno mismo el actor principal), ¡pero nadie puede curarlo todo!

No obstante, podemos intentar mejorar nuestro bienestar y, a veces, de forma misteriosa, cuando la mejora perdura, podemos hablar de «curación».